Y solo el arte y la maravilla de la música pueden hacernos más humanos puesto que nuestro Requiem ha empezado y se basa en el poderoso encanto del dolor causado a través de la inocencia y la belleza.
Dotados de voces extraordinarias y armados con los más poderosos regalos que la sociedad de la noche puede dar, los Angelli somos aquellos decadentes y sofisticados vampiros que regimos poderosos sobre los destinos de miles de mortales que ansían nuestra compañía, nuestras voces y nuestro encanto. Ya no somos lo que fuimos un día pero añoramos tanto aquellos días en los que la inocencia y el candor nos envolvían que buscamos a todos aquellos que compartan estas características con nosotros y que amen tanto la música como nosotros mismos lo hacemos. Pero no lo hacemos por la necesidad de amor sino la necesidad de pervertir aquellas deliciosas almas llenas de pureza y convertirlas lentamente en perversas creaciones de la noche ansiosas por sangre y vicio mientras que nos deleitamos en la poderosa capacidad vocal que poseen nuestros pequeños chiquillos.
No huimos de nuestro deber como vampiros, somos más que los exquisitos Daeva, somos los verdaderos seres que trascienden la magia y se convierten en poderosos eruditos de la música y la perversión.
Ahora solo queda preguntarte ¿Serás el próximo en dejarte seducir por las viciosas telas de la noche con la imagen de ángel de bondad?
No nos busques, nosotros ya te hemos encontrado.
